Reflexiones sobre la mujer

Desde hace unos años me he interesado por conocer más a fondo sobre los temas de género, en especial lo que se refiere al papel de la mujer y las corrientes feministas, tiene que ver por supuesto con mi propia experiencia, pero también con la visión que otras mujeres me han enseñado en el camino, tanto en el ámbito personal, como profesional.

Creo que conté con suerte de toparme desde temprana edad y aún en el seno familiar con mujeres que me mostraron un camino independiente, autónomo, poco comentado en mi adolescencia y poco debatido ya en mi etapa adulta.

Particularmente ahora, que he tenido la oportunidad de explorar libremente literatura sobre el tema y adicionalmente conversar abiertamente sobre el feminismo, y la posición de la mujer en la sociedad, me siento aún más conectada a trabajar por esas causas y en la medida de lo posible ayudar a mujeres y a hombres a informarse, porque hay mucha confusión al respecto y tergiversación.

En esta nota en particular quiero referirme al temor común que existe entre las mujeres  a hablar sobre este tema, el feminismo, las luchas de las mujeres, de género y en particular el rol que cumplimos socialmente, lo haré a través de los siguientes puntos:

Si eres feminista estás en contra de los hombres

No, esto no es verdad, y creo que es una de las frases más comunes que escucho, la realidad es que el feminismo no busca acabar con los hombres, dominarlos o hacerlos a un lado (de hecho es imposible, compartimos la tierra) por el contrario está enfocada en crear conjuntamente un movimiento que permita a ambos compartir fraternalmente los distintos roles que desempeñamos en la sociedad.

Sí, es verdad que hay mujeres que con su discurso tergiversan la causa feminista, pero en este caso, le toca a cada quien hacer la tarea de buscar más información y no caer en especulaciones vacías y falsas.

Hablar sobre el empoderamiento de las mujeres aleja a los hombres

Es probable, aún existe y creo que hay hombres que no están listos para compartir y entender este cambio que exige la sociedad, pero también hay cada día más hombres dispuestos a luchar por esta misma causa, conscientes de que el bienestar y las oportunidades que tengan las mujeres también son oportunidades para ellos.

En este aspecto las mujeres jugamos un papel primordial, el de ser líderes y guardianas del conocimiento para nuestros hermanos, amigos, padres e hijos, estrechar relaciones desde el dialogo, y el entendimiento, informándonos e informándolos, las nuevas generaciones necesitan un discurso diferente, amplio, nuevo, que eduque sobre cómo relacionarnos como iguales, basados en el respeto.

Los roles del hogar son para las mujeres

Para mi esta es una de las grandes mentiras que se promueven y que por supuesto crean tensiones en las mujeres que desempeñan este rol.

Lo primero que diré es que aunque nos cueste trabajo aceptarlo, la realidad es que la mayoría de mujeres se quedan en la casa, o porque no tienen estudios, están cuidando a los hijos, o acordaron con el marido no trabajar.

Sí, es así, pueden justificarse de la mejor forma posible, pero la realidad es que tomaron decisiones basadas en lo que consideraron una incapacidad, una falta de posibilidad, lo que nadie les dice es que históricamente se nos ha negado a las mujeres el mismo acceso a la educación, al trabajo, a salarios iguales, a oportunidades, por eso para nosotras todo es aparentemente más difícil, más limitado y de esa forma las opciones como quedarse en el hogar, terminan por ser más “fáciles” y “cómodas”.

Deberíamos admitir sin verguenza, que a muchas les encantaría retomar su vida laboral, tener planes paralelos, y salirse de la intensa rutina que implica quedarse en el hogar.

Quitarse los temores de perder al marido, de parecer una bandida si sale con las amigas, y toda la suma de estereotipos que dicen que ser de la "casa" la hacen una mejor mujer, madre y esposa.

En este punto NO incluyo a quienes con estudios, autonomía e independiencia igual decidieron quedarse en el hogar, porque claramente está basando su decisión en el conocimiento, pero no seamos egoístas, ¿Es este el caso de la mayoría?

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Finalizo con la frase con la que concluye Simone de Beavouir, filosofa y destacada feminista francesa su libro “El Segundo Sexo” que revolucionó en su tiempo y aún ahora por la forma como describe los diferentes roles que desempeña la mujer, desde aspectos psicológicos, históricos y sociales:

“Al hombre le corresponde hacer triunfar el reino de la libertad en la entraña del mundo dado. Para lograr esa suprema victoria es preciso, entre otras cosas, que por encima de las diferenciaciones naturales, hombres y mujeres afirmen sin equivoco su fraternidad”